Comportamientos de los motociclistas que comprometen la seguridad vial

Está comprobado que ir a bordo de una motocicleta y de cualquier otro vehículo a motor tiene efectos psicológicos que alteran la percepción de seguridad y poder de los conductores. Esto explica comportamientos que se deben tener en cuenta para la seguridad vial en Colombia.

Adquirir y manejar una moto es una experiencia que causa felicidad y que anticipa una mejor calidad de vida. Desplazarse más fácilmente y acortar distancias son cambios que ayudan a tener más tiempo para realizar actividades de esparcimiento y diversión. En este tema lo que la mayoría no tiene en cuenta, es que el conductor de una motocicleta experimenta sensaciones que no preveía: la sensación de libertad que da la velocidad y la potencia de la moto, puede suponer un riesgo para el conductor y el resto de actores de la vía si no se administra de forma adecuada.

Según estudios internacionales, existen cinco aspectos psicológicos que afectan el comportamiento de un motociclista y que influencian la seguridad de todos los actores de la vía. Conózcalos, evítelos y tenga en cuenta que la mente en moto es diferente a la mente en tierra.

  1. “Mis habilidades son mejores que las de los demás”: casi todos los motociclistas creen que sus habilidades son superiores debido a la experiencia que tienen en la ruta. Sin embargo, esto no siempre es cierto; combata este pensamiento dañino teniendo en cuenta que, al comportarnos adecuadamente, obligamos a los otros actores de la vía a comportarse bien también.
  2. “Yo me doy cuenta de lo que pasa con anticipación”: ningún motociclista puede estar pendiente un 100% de todo lo que sucede a su alrededor (observar las demás motocicletas, carros, peatones, el clima y condiciones de la carretera es imposible al mismo tiempo), por eso conducir de manera preventiva es la única garantía para evitar incidentes de tránsito.
  3. “El semáforo está en amarillo, voy a arrancar”: la creencia de que uno de los principales beneficios de tener una motocicleta es poder ir más rápido que los demás puede ser muy riesgosa. La conveniencia propia es uno de los factores que nos llevan a pensar que “culebrear”, adelantarnos por la derecha a los carros y otros comportamientos inseguros, no tienen ningún riesgo cuando los hago. Siempre tenga en cuenta que las reglas de la vía deben seguirse sin excepción.
  4. “Siempre que manejo hago piques”: los motociclistas en su mayoría cuando deciden exceder los límites de velocidad o hacer maniobras de riesgo, se dejan llevar por la “emoción” y la adrenalina que produce realizar movimientos atrevidos con la motocicleta, siendo esto un causante de incidentes de tránsito.
  5. “Con esto que bebí puedo manejar”: uno de los pensamientos más riesgosos de los conductores de motocicleta es creer que puede ingerir un poco de alcohol o estar muy cansado y aun así conducir adecuadamente; recuerde, nunca maneje si ha tomado y/o si está cansado, trate de descansar un poco o detener el vehículo.

A modo de conclusión, ¿cuál es la solución para no incurrir en estos casos documentados de comportamientos riesgosos que se dan al conducir una motocicleta? Pensar en lo que puede perder, puede ser un buen mecanismo. Así de sencillo.

Está demostrado que recordar a las personas que nos esperan en casa, evitará que caigamos en cualquiera de las anteriores conductas. El estudio reveló cómo las personas que llevan de acompañante a un ser querido se comportan con más cuidado y disminuyen su velocidad, entonces, ¿por qué no pensar en ellos cuando vamos solos?