Si eres motociclista en Colombia, seguro te has enterado de que este año entrarán en vigencia nuevas normativas que afectarán la circulación y seguridad de las motos en el país. Pero, ¿sabes exactamente en qué consisten estos cambios y cómo te impactarán? Aquí te contamos todo lo que necesitas saber para estar al día y cumplir con las nuevas disposiciones.
Normas de seguridad para motos en Colombia
La seguridad vial es una prioridad, y por ello, las autoridades han implementado nuevas medidas que buscan reducir los accidentes y proteger a todos los actores en las vías. A continuación, te explicamos las principales modificaciones que entrarán en vigor en 2025.
Sistemas de frenado: ABS y CBS
Uno de los cambios más significativos tiene que ver con los sistemas de frenado que deberán incorporar las motocicletas nuevas:
- Motos entre 50cc y 150cc: Deberán contar con sistemas de frenado combinado (CBS) o antibloqueo de frenos (ABS).
- Motos con cilindraje superior a 150cc: Será obligatorio que cuenten con sistema ABS.
Estos sistemas mejoran la estabilidad y control de la moto durante el frenado, reduciendo el riesgo de accidentes por bloqueo de ruedas. En carreteras mojadas, con arena o huecos, marcan la diferencia entre frenar a tiempo o terminar en el suelo.
¿Qué es el sistema CBS?, es una tecnología diseñada para mejorar la seguridad y estabilidad de las motocicletas durante el frenado. Este sistema distribuye de manera automática la fuerza de frenado entre las ruedas delanteras y traseras al accionar únicamente uno de los frenos, ya sea el delantero o el trasero. El objetivo principal es proporcionar un frenado más equilibrado y eficiente, reduciendo las posibilidades de deslizamiento y mejorando el control de la moto, especialmente en situaciones de emergencia o cuando se frenan de manera abrupta.
¿Cómo funciona el CBS?
Cuando un motociclista acciona el freno trasero, el CBS distribuye una parte de la fuerza de frenado al freno delantero, lo que genera un mayor equilibrio entre ambas llantas. Esto se hace de forma automática y sin que el conductor tenga que realizar ninguna acción adicional. Del mismo modo, si se acciona solo el freno delantero, el sistema también aplica fuerza al freno trasero. Esto contribuye a una distribución óptima de la fuerza, lo que se traduce en una mayor estabilidad y control al frenar, especialmente en superficies resbaladizas o irregulares.
Proporción de frenado 70 – 30
Uno de los aspectos clave del sistema CBS es la proporción de frenado entre las llantas delanteras y traseras, que generalmente sigue una distribución de 70% en la rueda delantera y 30% en la trasera. Esta proporción se basa en el principio de que, en una moto, la mayor parte del peso y la fuerza de frenado se concentra en la rueda delantera debido a la transferencia de peso hacia adelante cuando se frena. La rueda delantera es la que soporta la mayor parte de la carga durante el proceso de frenado, ya que es la que tiene el contacto directo con el terreno y, por lo tanto, tiene más capacidad de adherencia.
Importancia de la proporción 70 – 30
La proporción 70-30 es crucial porque garantiza un frenado más estable y efectivo, optimizando el rendimiento de ambos frenos de manera que no haya un exceso de fuerza aplicada a una sola rueda. A continuación, se explican las razones por las cuales esta proporción es tan importante:
- Mayor estabilidad al frenar: Al aplicar más fuerza de frenado en la rueda delantera (70 %), el sistema asegura que el motociclista mantenga un control firme de la moto. La rueda delantera es la que tiene mayor tracción, por lo que distribuir más frenada aquí maximiza la eficacia sin comprometer la estabilidad. Si se aplicara más fuerza al freno trasero, podría resultar en un deslizamiento de la rueda trasera, especialmente en superficies resbaladizas.
- Reducción del riesgo de derrapes: En el caso de que se frene excesivamente con el freno trasero, el riesgo de que la rueda trasera se bloquee y derrape aumenta considerablemente. El CBS ayuda a evitar este tipo de situaciones al reducir la cantidad de fuerza aplicada al freno trasero. De este modo, se previene que la rueda trasera se deslice, proporcionando un frenado más suave y controlado.
- Mejor rendimiento en diferentes condiciones de carretera: La proporción 70-30 también es ideal para adaptarse a una variedad de condiciones de carretera. En superficies secas y firmes, el sistema CBS distribuye la fuerza de manera eficiente, proporcionando un frenado potente y estable. En carreteras mojadas o irregulares, el sistema asegura que la moto no pierda tracción, manteniendo las llantas firmemente adheridas al suelo.
- Frenado más seguro en situaciones de emergencia: En una situación de emergencia, el sistema CBS es muy beneficioso porque permite que el conductor frene de forma rápida sin la preocupación de perder el control de la moto. La distribución equilibrada de la fuerza entre las ruedas delantera y trasera ayuda a evitar bloqueos de las llantas, reduciendo las posibilidades de caídas o accidentes debido a un frenado inadecuado.
¿Qué es el sistema ABS? El ABS (Anti-lock Braking System), es una de las tecnologías más importantes y efectivas para mejorar la seguridad en las motocicletas. Su función principal es evitar que las ruedas se bloqueen cuando el motociclista frena de manera brusca o de emergencia, lo que podría resultar en un derrapaje o pérdida total de control de la moto.
¿Cómo funciona el ABS?
Cuando se frena bruscamente, la moto experimenta una transferencia de peso hacia adelante, lo que puede hacer que las ruedas delanteras o traseras pierdan tracción, especialmente si el suelo está resbaladizo, mojado o irregular. Si una de las ruedas se bloquea, se pierde el contacto con el asfalto y la moto no puede detenerse de manera eficiente. Esto aumenta el riesgo de caídas, ya que la moto no puede mantenerse estable.
El sistema ABS interviene en ese momento crítico de frenado, regulando la presión del freno de forma automática, lo que permite que las ruedas sigan girando en lugar de bloquearse. El ABS detecta cuando una rueda está cerca de bloquearse y ajusta la presión de frenado de manera rápida y precisa, evitando el bloqueo completo y manteniendo el control del vehículo. En lugar de bloquearse, las ruedas continúan girando, lo que permite al conductor seguir maniobrando la moto mientras frena, incluso en situaciones extremas.
Componentes clave del sistema ABS
- Sensores de velocidad de las ruedas: Los sensores de ABS están instalados en las ruedas de la moto y monitorean la velocidad de cada una de ellas. Si uno de los sensores detecta que una rueda está desacelerando más rápido que la otra (indicando un bloqueo), el sistema interviene.
- Unidad de control electrónico (ECU): La ECU procesa la información que recibe de los sensores de las ruedas. Basado en estos datos, la unidad determina si es necesario intervenir en el sistema de frenos y cuánto debe reducirse la presión para evitar el bloqueo de las ruedas.
- Válvulas de control de presión: Las válvulas regulan la presión del freno al ajustarla de manera automática para evitar que las ruedas se bloqueen. Estas válvulas permiten que el sistema ABS controle la cantidad de presión aplicada a los frenos en función de las condiciones de la carretera y la velocidad de la rueda.
- Bomba de freno: El sistema de ABS incluye una bomba de freno que ajusta la presión en las líneas de freno para evitar que se aplique demasiada presión y cause el bloqueo de las ruedas.
Iluminación permanente
A partir de 2025, todas las motocicletas deberán contar con un sistema de iluminación que permanezca encendido incluso durante el día. Actualmente, el 89 % de las motos nuevas ya incluyen esta característica, pero con la nueva normativa, será un requisito obligatorio para todas. Esto aumenta la visibilidad de las motos frente a otros vehículos, sobre todo en vías oscuras, túneles o en días lluviosos.
Llantas con homologación internacional
Otra modificación importante se refiere a las llantas de las motos. Desde mayo de 2025, los neumáticos deberán cumplir con homologaciones internacionales y contar con inscripciones que indiquen el estándar que cumplen, como 75R, DOT o la marca de homologación ‘E’. Las llantas que no cumplan con este requisito no podrán circular.
Esto busca garantizar que las llantas cumplan estándares de seguridad frente al desgaste, tracción y resistencia. Significa que ya no servirá comprar cualquier llanta económica sin certificación.
Revisión técnico-mecánica
La Ley 2294 del 19 de mayo de 2023 establece que las motocicletas nuevas estarán exentas de la revisión técnico-mecánica durante los dos primeros años desde su matrícula. Es decir, si matriculas tu moto en 2024 o 2025, no tendrás que realizar esta inspección en 2025. A partir del tercer año, la revisión será anual.
Este beneficio también exige más responsabilidad del conductor, ya que aunque no hay revisión, el buen estado de la moto sigue siendo obligatorio.
Nuevas señales de tránsito
Desde el 1 de abril de 2025, entrará en vigencia el nuevo Manual de Señalización Vial, que incluye señales específicas para motociclistas. Entre ellas se encuentran las señales que indican el inicio y fin de las motovías, zonas de espera adelantada en intersecciones y parqueaderos exclusivos para motos.
Estas señales facilitarán la organización del tránsito y permitirán a los motociclistas tener espacios designados y más seguros en la vía.
Restricciones locales
Algunas ciudades han implementado medidas adicionales para regular la circulación de motocicletas. Por ejemplo, en Barranquilla, desde noviembre de 2024 hasta octubre de 2025, se restringió la circulación nocturna de motos entre las 11:00 p. m. y las 5:00 a. m. Además, se prohibió el tránsito en ciertas zonas del centro durante horarios específicos.
En ciudades como Bogotá o Medellín también podrían sumarse nuevas restricciones, como zonas de no circulación o limitaciones de parrillero. Es clave estar atento a las decisiones de cada alcaldía.
¿Cómo prepararse para estos cambios?
- Actualiza tu moto: Si planeas adquirir una moto nueva, asegúrate de que cumpla con las nuevas normativas en cuanto a frenos, iluminación y llantas.
- Mantente informado: Las regulaciones pueden variar según la ciudad. Consulta las disposiciones locales y nacionales para evitar sanciones.
- Participa en capacitaciones: Muchas entidades ofrecen cursos sobre las nuevas normativas y seguridad vial. Aprovecha estos recursos para estar mejor preparado.
- Verifica tus llantas actuales: Si están cerca de cambio, asegúrate de que las nuevas tengan las certificaciones necesarias. Es mejor prevenir que quedar varado o ser multado.
- Haz revisiones preventivas: Aunque no estés obligado a la técnico-mecánica, revisar frenos, luces, suspensión y motor te ahorra dolores de cabeza.
Preguntas frecuentes
¿Qué pasa si tengo una moto antigua que no cumple con estas normas?
Las motos matriculadas antes de la entrada en vigencia podrán seguir circulando, pero no estarán exentas de ciertas condiciones o futuras restricciones. Si la moto no tiene ABS o CBS, deberás prestar especial atención al mantenimiento.
¿Puedo instalar ABS en una moto que no lo trae?
En la mayoría de casos no es viable. El ABS requiere sensores, unidad de control y componentes integrados desde fábrica. En su lugar, puedes asegurar una buena conducción y mantenimiento.
¿Cuánto cuestan unas llantas con homologación internacional? El valor depende de la marca y medida, pero puedes encontrar desde $120.000 hasta $300.000. Lo importante es verificar que tengan los sellos de calidad exigidos.
¿Qué beneficios me traen estas nuevas normas como conductor? Mejor visibilidad, frenado más seguro, menos accidentes y menor desgaste de tu moto. También te ayudan a evitar comparendos.
Mantente actualizado sobre las normativas en el país
Las nuevas normativas para motociclistas en Colombia buscan mejorar la seguridad y reducir la siniestralidad en las vías. Aunque adaptarse a estos cambios puede requerir inversión y aprendizaje, a largo plazo contribuirán a una movilidad más segura y eficiente para todos.
Como motociclista, es tu responsabilidad informarte y cumplir con estas disposiciones para garantizar tu bienestar y el de los demás usuarios de la vía. Más allá de una obligación, es una oportunidad para hacer parte de un tránsito más ordenado, respetuoso y seguro.